Se zarpa desde Puerto Pañuelo, en la península de Llao Llao. Luego de una hora de navegación, se pasa junto a la Isla Centinela, lugar donde descansan los restos del Perito Francisco Pascasio Moreno, padre de los parques nacionales argentinos. De allí la navegación continúa hasta arribar a la Cascada de los Cántaros.
Atravesando la frondosa vegetación de la selva valdiviana, se accede al nacimiento de la cascada, en el lago Cántaros, donde se puede apreciar un milenario alerce, de más de 1500 años.
Cinco minutos más tarde, se llega finalmente a Puerto Blest, lugar cuya belleza ha maravillado durante años a los turistas.
Aquí se halla la Hostería Blest, que hace honor al histórico alojamiento que allí se encontraba, y que fue recientemente reinaugurada. Es un lugar ideal para pasar la noche y descansar en medio de un entorno único. La hostería cuenta con un restaurante gourmet y, a pocos metros, existe otro espacio gastronómico con diferentes opciones.
Fuente: Barilocheturismo.gob.ar